La Casa Blanca confirmó que el presidente Donald Trump no emitirá una proclamación para reconocer junio como el Mes del Orgullo LGBT. Esta decisión marca un cambio claro respecto a administraciones anteriores y responde a una estrategia de gobierno orientada a recuperar los valores tradicionales y los cimientos de fe sobre los cuales fue fundada la nación.
La portavoz Karoline Leavitt declaró que “no hay planes para una proclamación para el mes de junio”, enfatizando que Trump “es un presidente para todos los estadounidenses, sin importar su raza, religión o credo”. Sin embargo, la Casa Blanca ha dejado claro que la agenda progresista y la promoción de ideologías LGBT no tendrán el mismo protagonismo que en años recientes.
En su segundo mandato, Trump ha firmado órdenes ejecutivas que establecen el reconocimiento oficial de solo dos géneros, masculino y femenino, en todos los documentos federales. Estas medidas han sido interpretadas como un rechazo directo a la ideología de género y al adoctrinamiento progresista que, según sectores conservadores, ha permeado la sociedad estadounidense en la última década.
A la par de esta decisión, líderes republicanos en el Congreso han impulsado iniciativas para declarar junio como el “Mes de la Familia”, promoviendo el diseño eterno y perfecto de Dios y rechazando lo que consideran la “mentira del orgullo”. La representante Mary Miller afirmó que la familia estadounidense está bajo ataque por una agenda izquierdista radical que busca redefinir el matrimonio y confundir a los niños.
El gobierno de Trump también ha anunciado la creación de una Oficina de Fe en la Casa Blanca, destinada a proteger los derechos de los cristianos y erradicar el sesgo anticristiano en las instituciones federales. Esta medida busca fortalecer la libertad religiosa y consolidar el liderazgo de Trump entre los sectores religiosos del país.
En el ámbito social, la decisión de la Casa Blanca ha tenido repercusiones inmediatas: varias cadenas minoristas han reducido o eliminado sus exhibiciones y productos con temática LGBT durante junio, reflejando un giro cultural hacia la defensa de valores tradicionales y familiares.