Durante la investidura del presidente electo Rodrigo Paz en Bolivia, se restituyó la Biblia en el Congreso, un símbolo ausente desde 2009. “Dios, patria y familia, lo juro”, dijo el mandatario antes de recibir la banda y las medallas presidenciales, en un acto que marcó el inicio de una nueva etapa política para el país andino.
A pesar de que Bolivia es un Estado laico, la mayoría de los diputados apoyó la juramentación con base en la Biblia. Solo un legislador realizó el juramento con el puño izquierdo en alto, gesto característico del Movimiento al Socialismo (MAS).
El Congreso quedó conformado por 49 diputados del PDC, 39 de Libre, 26 de Unidad, ocho de Alianza Popular, cinco de APB-Súmate, dos del MAS y uno del movimiento indígena Bia Yuqui. Paz, líder de centro, promete un giro tras casi 20 años de gobiernos socialistas.
“El país que heredamos está devastado… endeudado moral y materialmente, con filas interminables para conseguir combustible y mercados vacíos”, dijo Paz en su discurso inaugural, en el que aseguró que su gestión buscará restaurar la confianza y la estabilidad económica.
Según AP News, el presidente electo obtuvo el 54,5% de los votos frente al 45,5%, del candidato y expresidente, Jorge Quiroga. Su victoria coloca a Bolivia ante un panorama incierto, donde su gobierno deberá afrontar la reconstrucción de una economía debilitada y responder a las altas expectativas ciudadanas.

