Kast se impuso en el balotaje sobre la izquierdista Jeannette Jara en su tercer intento por llegar al Palacio de La Moneda. Es un abogado conservador con 30 años en la política chilena. Su campaña estuvo centrada en la recuperación de la seguridad y en la deportación masiva de migrantes irregulares.
De 59 años y padre de nueve hijos, Kast es un abogado conservador sin reservas: rechaza el aborto incluso en casos de violación, la píldora anticonceptiva de emergencia, el divorcio, el matrimonio homosexual y la eutanasia.
José Antonio Kast, fue elegido presidente de Chile con un 58,3% de los votos, frente al 41,7% obtenido por la candidata comunista Jeannette Jara. Este resultado marca el peor desempeño de la izquierda desde el retorno a la democracia en 1990. Kast triunfó con el respaldo de sectores históricos y libertarios de la derecha, consolidando un giro conservador en el país.
Aunque su partido aumentó su representación en la Cámara de Diputados, Kast no contará con mayoría en el Congreso. La oposición de izquierda mantendrá fuerza en el Senado, lo que obligará al nuevo presidente a negociar constantemente. Sin embargo, por primera vez desde 1990, la derecha tendrá mayoría parlamentaria, en un escenario político marcado por la fragmentación.
El presidente electo ha prometido enfrentar tres crisis principales: delincuencia, migración irregular y bajo crecimiento económico. Kast se define como “provida y profamilia”, y plantea medidas radicales como la construcción de una mega cárcel en el desierto de Atacama. Su discurso de orden y seguridad responde al temor ciudadano frente al aumento de homicidios y la inseguridad pública.
La tasa de desempleo se sitúa en 8,4%, mientras el crecimiento económico permanece estancado en un 2% anual desde 2019. Kast promete recortar 6,500 millones de dólares del gasto fiscal, aunque no ha detallado cómo lo hará. Entre sus objetivos figuran reactivar la inversión, garantizar salarios justos y recuperar la confianza de la sociedad en la gestión económica.
Crisis social y migratoria
El sistema de salud enfrenta largas listas de espera y dificultades para acceder a medicamentos, lo que representa otro desafío para el nuevo gobierno. En paralelo, Kast ha anunciado medidas estrictas contra los cerca de 330,000 migrantes irregulares que residen en Chile, en su mayoría venezolanos. Estas políticas buscan responder a las preocupaciones sociales y reforzar su propuesta de seguridad nacional.
