El ex pastor de megaiglesia Francis Chan, quien fundó la red de iglesias domésticas We Are Church en 2011, dice que se alejó del modelo de adoración de la megaiglesia debido a una confluencia de razones, incluido el sentimiento de que tendría más seguidores que Jesús y Pablo si existieran en la cultura cristiana actual de Estados Unidos.
Chan, quien fundó Cornerstone Community Church en Simi Valley, California, en 1994 y la dirigió durante casi 16 años antes de renunciar en 2010, recordó su partida durante una entrevista con el rapero cristiano Lecrae en su podcast » Deep End with Lecrae «.
«Recuerdo que una noche le dije a mi esposa… Simplemente la miré y pensé: ‘Cariño, siento que si el apóstol Pablo o Jesús tuvieran una iglesia en Simi Valley, la mía sería más grande, y eso me preocupa'», le contó a Lecrae.
«Tendría una iglesia más grande que la de Jesús porque sé cómo mantener a las multitudes. Ellos no. Y entonces empiezas a darte cuenta: ‘Bueno, ¿de verdad estoy siendo como Cristo?’. Y luego, al examinar las Escrituras y analizar lo que se manda, si Dios pudiera tener algo parecido a una iglesia, ¿cuál sería el punto principal en las Escrituras?», razonó.
Aunque Chan parece sugerir que Jesús y el apóstol Pablo no sabían cómo mantener a una multitud, la Biblia registra que ambos personajes ministraron a grandes multitudes en múltiples ocasiones. Jesús interactuaba regularmente con su audiencia, a veces de miles de personas, combinando predicación, enseñanza y milagros, como se aprecia en su alimentación de los 5.000, donde algunas estimaciones sostienen que podrían haber estado presentes hasta 20.000 personas .
Además de su preocupación de que probablemente habría tenido más seguidores que Jesús y Pablo en Simi Valley, Chan cuestionó si la gente de su iglesia se amaba «unos a otros tanto como Cristo nos amó».
«Yo pienso, eso no es lo que yo creé. Tengo a un montón de gente, miles de personas; estamos jugando a la iglesia», dijo.
Chan dijo que también le preocupaba que los dones sobrenaturales de la Iglesia Primitiva no se estuvieran manifestando en su megaiglesia.
«Todos en esa iglesia [Iglesia Primitiva] tienen un don sobrenatural para el cuerpo, y pienso: ‘Bueno, si tuviera 5.000 personas con un Espíritu Santo sobrenatural, como si Dios estuviera en ellas, ya sea hablándoles, sanándoles, o lo que sea. Hay 5.000 personas con algún tipo de don, y no conozco ninguno de estos dones, y no se están usando en la iglesia'», dijo.
Dijo que su partida no se debió a «una sola cosa», sino más bien a «una tormenta perfecta de todas estas verdades de las Escrituras que me vinieron a la mente». Lo único que Chan quería, dijo, era «ser fiel a la palabra de Dios».
«Puedo soltar los números, la fama, el dinero, todo lo demás», dijo Chan. «Quiero complacerte».
«Finalmente pensé: ‘Creo que estoy causando más problemas que ayudando a la iglesia’. Así que fue entonces cuando decidí alejarme y quizás ordenar mis ideas y crear algo diferente'», continuó.
Chan dijo que puede haber sido un poco idealista sobre cómo esperaba que fuera su movimiento de iglesias en casas, pero sostiene que ahora está mucho más en paz consigo mismo.
Me habría sentido muy infiel si no hubiera hecho el cambio. Tenía cierto idealismo; pensé que sería fácil. Lo hacen en China. Hay 100 millones de ellos en iglesias domésticas. Así que, bueno, van a ser millones de personas, y te das cuenta de que no es fácil. Pero tengo paz, y eso es lo que antes no tenía», dijo Chan.
Puede que no parezca tan exitoso tener muchos hogares por todas partes con grupos pequeños que se aman y diferentes personas que usan sus dones, pero me siento en paz. Siento que sé que realmente amo a estas personas, y ellas me aman de verdad, y estas relaciones son profundas, y muchos de ellos están usando sus dones espirituales.
El hombre de 57 años dice que, aunque está en paz con su movimiento de iglesias en casa, hay días en que siente la necesidad de volver a estar frente a una multitud. Pero cree que el modelo de megaiglesia es cada vez más difícil de sostener.
No voy a mentir; hay días en que pienso: ‘¡Caramba! De verdad que tengo más talento para estar frente a una multitud y simplemente enseñar’. Si solo se fijan en mis dones naturales, soy mejor pastor de una megaiglesia, y quién sabe, quizá vuelva a serlo algún día», dijo. «Pero ahora mismo pienso: esta es la paz que tengo, y creo que este es el futuro. Cada vez es más difícil para quienes trabajan en las grandes iglesias. Muchos son buenos amigos míos, y se sienten miserables, y es un momento difícil pastorear las grandes iglesias».