
La Iglesia secreta iraní , que ya sufre persecución, ahora también enfrenta los desafíos de la guerra entre Irán e Israel.
En ambos países, civiles inocentes han muerto en el conflicto de los últimos días. Tras el ataque del ejército israelí a plantas nucleares, el caos se ha apoderado del país, gobernado por un régimen islámico represivo.
En Teherán, los residentes intentan huir de la capital, formando largas colas en las carreteras y en las gasolineras.
En medio de la inestabilidad, los cristianos iraníes y los líderes de las iglesias locales están pidiendo oraciones, según Puertas Abiertas.
Una familia cristiana en una de las principales ciudades de Irán perdió a su padre. Había enviado a su esposa y sus dos hijos pequeños a una ciudad más segura, pero cuando se disponía a abandonar su hogar, una bomba cercana le quitó la vida. Su familia está ahora desbordada de dolor, dijo el pastor Ali*, quien dirige varias iglesias en casas de Irán a través de un ministerio en línea.
En el contexto de la guerra, los cristianos en Irán se vuelven aún más vulnerables a la persecución, según Morteza*, un cristiano iraní.
En lugar de proteger a su pueblo, el gobierno iraní arresta a cualquiera que tome o comparta fotos y videos con los medios. Los cristianos son especialmente vulnerables, ya que corren el riesgo de ser acusados de espionaje y considerados una amenaza para la seguridad nacional. Si se descubre su fe, las consecuencias serán aún peores. Por favor, en estos días oscuros, sean la voz de la iglesia iraní —dijo a Puertas Abiertas—.
El líder cristiano Fereshteh* describió el ambiente caótico que enfrenta la población iraní.
La gente está abandonando sus hogares y pertenencias, huyendo de las grandes ciudades sin saber si podrán regresar ni cuándo. Los precios de los alimentos se han disparado, y muchos intentan abastecerse para emergencias. En pueblos más pequeños, los hoteles y pensiones se están llenando rápidamente, dijo.
A pesar de enfrentar la persecución y ahora las consecuencias del conflicto en curso, la iglesia iraní continúa confiando en Jesús y sus líderes se están preparando para los peores escenarios.
La Iglesia en Irán ha sido resiliente y ha experimentado un crecimiento cada vez mayor desde la revolución de 1979 que estableció un régimen islámico extremista.