
Después de vivir una década en la homosexualidad, Brian Wheelock testifica haber sido transformado por Jesús. Hoy, es esposo de Pam desde hace casi 17 años y padre de tres hijas.
Wheelock creció en un hogar cristiano en Nueva Jersey, Estados Unidos, donde asistía ocasionalmente a la iglesia. Sus primeras experiencias homosexuales comenzaron en la infancia, durante fiestas de pijamas.
Con el tiempo, esas vivencias se convirtieron en un estilo de vida que adoptó durante la adolescencia y la universidad.
“Se convirtió en una forma de sentirme. Pensé que así era como Dios me había hecho”, relató Brian, quien llegó a vivir abiertamente como homosexual mientras estudiaba en la universidad. A pesar de que creía en Dios, reconoce que no tenía una relación personal con Jesús.
Tras mudarse a Europa, se sumergió en una vida de excesos y promiscuidad, lo que lo llevó a una profunda depresión. Fue allí donde experimentó un punto de quiebre.
De regreso en EE.UU., comenzó a asistir a una iglesia y entregó su vida a Cristo. Aunque las tentaciones no desaparecieron de inmediato, encontró apoyo en amigos cristianos y fue sanando su identidad.
“No tenía figuras masculinas sólidas en mi vida. Dios usó hombres piadosos para ayudarme a caminar en libertad”, expresó.
Hoy, Brian comparte su historia como orador cristiano, ayudando a otros a encontrar esperanza y propósito en Cristo. “La vida en Jesús me dio lo que siempre había anhelado: identidad, familia y un futuro con propósito”, concluyo. le reveló.