
El bombardeo es la respuesta de Irán a los ataques israelíes a sus instalaciones nucleares, ocurridos en la madrugada del viernes (13).
Irán lanzó misiles contra Israel el viernes (13), en respuesta a los ataques a las instalaciones nucleares iraníes temprano esta mañana.
Según Reuters, se escucharon explosiones en Tel Aviv y Jerusalén, al tiempo que sonaban las sirenas de alarma. Edificios residenciales fueron alcanzados, pero aún se desconoce si hubo víctimas.
La agencia de noticias estatal iraní, IRNA, dijo que cientos de misiles fueron lanzados en represalia por uno de los mayores ataques israelíes contra Irán.
Se estima que se dispararon más de 150 misiles. Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) están interceptando el bombardeo.
El portavoz militar de Israel confirmó que el ataque fue realizado por misiles iraníes.
Un vídeo que circula en las redes sociales muestra a judíos cantando en el garaje de un edificio residencial mientras se produce el ataque.
Ataque a centrales nucleares
En la madrugada del viernes (13), Israel lanzó un gran ataque contra Irán, apuntando a instalaciones nucleares.
Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) dijeron que la ofensiva tuvo como objetivo más de 100 objetivos, incluidos comandantes del ejército iraní y líderes del programa nuclear.
La operación, denominada Operación León Naciente, mató a Hossein Salami, jefe del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán (CGRI); Gholamali Rashid, comandante del Cuartel General Central de Khatam-al Anbiya; y al jefe del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas iraníes, Mohammad Bagheri.
Según la agencia de noticias Tasnim, afiliada al CGRI, seis científicos que trabajaban en el programa nuclear de Irán también fueron ejecutados.
Horas después de los ataques iniciales, se produjo un bombardeo contra la planta nuclear de Natanz, ubicada a unos 225 kilómetros (140 millas) de la capital, según medios estatales iraníes. Natanz es una de las instalaciones de enriquecimiento de uranio más conocidas de Irán.
En un discurso sobre la operación, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, declaró que el ataque militar tenía como objetivo “revertir la amenaza iraní a la supervivencia misma de Israel”.
Netanyahu afirmó que la operación continuaría los días que fueran necesarios y que Irán representaba una amenaza nuclear. «Si no se detiene, Irán podría producir un arma nuclear en muy poco tiempo», declaró.