El pastor de una maestra que murió durante el tiroteo en la escuela cristiana Abundant Life en Madison, Wisconsin, la semana pasada la recordó como «una mujer que amaba a Jesús y amaba a la gente».
Erin West, una educadora de 42 años de DeForest, fue un miembro apreciado tanto de su iglesia como de la comunidad escolar cristiana, donde enseñó durante cuatro años. “… Era una mujer que amaba a Jesús y amaba a las personas, y honestamente por eso estaba en ese salón de clases el lunes», dijo el pastor Rob Warren de la Iglesia Doxa.
El tiroteo del lunes, llevado a cabo por Natalie «Samantha» Rupnow, de 15 años, resultó en la muerte de West y de la estudiante de 14 años Rubi Patricia Vergara, de Madison. Otros dos estudiantes sufrieron heridas graves y permanecieron hospitalizados mientras las familias y la escuela lidiaban con las secuelas inmediatas.
The Associated Press informó que el ataque duró ocho minutos durante la pausa regular para la merienda de la escuela, un tiempo típicamente lleno de las rutinas simples de la vida escolar.
West fue «amable… extremadamente compasivo, generoso», agregó Warren, quien recientemente se había unido a la Iglesia Doxa con su familia.
El pastor fue uno de los primeros en responder a la escena, llegando rápidamente para apoyar a los padres ansiosos que buscaban encontrar a sus hijos. Fue la persona que informó al esposo de Erin y a sus tres hijas de su muerte prematura.
Barbara Wiers, directora de primaria y comunicaciones de la Escuela Cristiana Abundant Life, también habló sobre la tragedia. «¿Estamos rotos en este momento? Sí. ¿Estamos magullados y maltratados? Sí», dijo Wiers citado por la AP. «Pero volveremos a reír, y Él volverá a convertir nuestro lamento en alegría. Y seguiremos».
Warren, quien ha sido testigo de los efectos devastadores de los tiroteos escolares en todo el país, expresó que nada podría haberlo preparado para una tragedia que golpeó tan cerca de casa. «Es tu amigo y son los hijos de tu amigo a los que estás mirando. Simplemente se vuelve cada vez más real», dijo.
«Él sabe que no es solo el sentimiento de: ‘Voy a verla de nuevo algún día y ella está en paz’, sino que debido a su fe, sabemos que ella realmente está en paz en este momento», agregó el pastor.